"Familias que estan durante todo un año
sin hablarse, odiandose, envidiandose, que luego se reunen en torno a una mesa,
como si no pasara nada, cuando una buena mesa solo se comparte con gente
honorable. Celebraciones cristianas de todo tipo, inculcadas, obligadas,
bombardeadas irrespetuosamente sobre las mentes de la gente, sin importar si
son creyentes o no, creando malestar, irrealidad, ira, por ser obligados a ver
un robo con mas de dos mil años de antiguedad. Personajes y personajillos, con
mas o menos arraigo popular, que ganan millones de euros al año, pidiendo y
anunciando una y otra vez a un pais, una generación en crisis, sin motivación,
sin medios, sin casa, sin nada... que den dinero, un euro, un sms, un
boligrafo, pastillas contra el dolor ajeno las llaman...cuando con lo que ganan
todos juntos en un mes, seguramente se resolverian muchos problemas de hambre,
y cualquiera de nosotros tenemos que pensar en que y en como gastar un maldito
euro. Interminables filas de zombies caminando por las calles, abarrotandolo
todo, haciendo ruido, riendo histericamente, ensuciando, arrasando todo a su
paso, todos en la misma dirección, con el mismo fin. Defender el consumo masivo
e irracional, seguir llenando el plato de los ricos, vaciando el propio.
Durante una horas, unos dias, no importa la crisis, no importa que los precios
se disparen un infinito por ciento, por cosas que en el dia de antes sabiamos
el precio de memoria. Todos con la misma sonrisa, la misma cara, la misma
felicidad forzada, para no ser menos que los demas, sin caer en la cuenta de
que no se es mejor que mañana. Enormes, abusivas, molestas campañas
publicitarias, donde se promueve la diferencia social, anunciando perfumes y
automoviles en entornos lujosos, haciendo ver quien esta arriba y quien abajo,
pero a la vez mostrando la falsa posibilidad de que el comprador se identifique
con lo que se muestra, de que sueñe, ni por un momento, con ser la estrella...a
mas de una estrella sin maquillar, sin su perfil bueno, me gustaria encontrarme
a las seis de la mañana en el metro para ir a currar, o mejor dicho, a intentar
encontrar trabajo. Cantidades ingentes de aparatos de iluminacion, bombillas de
todo tipo, adornos, carteles, que provocan un gasto energetico descomunal,
proporcionado por supuesto con las subidas en los recibos correspondientes
durante todo el año, y propiciando unos ingresos para las grandes empresas, que
no dan razon para los aumentos del siguiente año. Colas para soñar despierto en
las administraciones de loteria, carroñeros representando a un banco, que
despues buscan llenar su cartera de clientes, toneladas de basura en la calle,
despues de ¿una celebracion?... Ya no importa el reciclaje, alguien habra, de
los mucho miles de personas que pasan el umbral de la pobreza, que recicle al
dia suguiente, y alguien habra que limpie su conciencia comprando pastillas
contra el dolor ajeno. No hay nada que celebrar, no es otro año, es al dia
siguiente y ya esta, nada mas. El que creo todo esto, a buen seguro que era
inteligente, pero no por inventarse esta mierda, si no por saber que despues de
dos mil trece años, habria tanta gente que lo suguiera creyendo".
Escrito por Jose Luis Huerga