En el transcurso de la vida, casi siempre nos
cegamos en cojer el tren que mas lejos nos lleve, y dejamos pasar aquellos en
los que seguramente viajaremos mas comodos, sin importar el destino, ni el
recorrido. Nos olvidamos de disfrutar del intinerario, de los paisajes, de las
experiencias. Queremos que el tren funcione siempre, sin caer en la bella
expectativa de una averia, de tener que esperar a que se arregle. Mientras tanto, bajamos del vagón, y nos
reimos del destino, que nos hace vacilar, dudar, de por que precisamente una
averia, con la prisa con que vivimos. Queremos que ese tren llege ya, ahora,
inmediato, por que no llega ya? ya¡¡¡ ya¡¡¡ ya¡¡¡ No nos damos cuenta de que
vivimos en una estacion sin horarios, sin jefe, sin nada... ya no importa el tren,
ni el recorrido, tan solo importa subir al que realmente queramos, da lo mismo
que no se suba nadie mas, alguien habra en ese vagon, que nos hara el viaje mas
ameno, que no sabemos quien es, ni de donde, que esta ahi, que compartira el
viaje, que conducira ese tren, que nos extrañara que tambien haya subido,
cuando todo el mundo se quedó en la estación, y que, para nuestra sorpresa, nos
va a acompañar hasta el final, pues le importamos, cuando ya toda esperanza de
viajar por las vias de nuestra vida, era de soledad, y estaba perdida. Yo
encontre ese tren, y encontre al viajero...
Escrito por Jose Luis Huerga
Escrito por Jose Luis Huerga
Me ha gustado la analogía, es realmente acertada. Yo quizás también opte por los viajes largos, pero te aseguro que disfruto cada minuto mirando por la ventanilla y a la cara de todos los que viajan conmigo.
ResponderEliminar¿Por qué tanta prisa? ¿Adonde queremos llegar tan rápido? ¿Por qué queremos vivir nuestra vida tan rápido? Más vale para mí una vida más corta pero más aprovechada que una larga que pasa sin darnos cuenta.
Creo que mucha gente necesita encontrar ese tren...
¡Un saludo!
Sabes lo mejor de todo Luis? Que por muy rápido que queramos marchar en la vida, no nos damos cuenta de que tenemos que ir nosotros hacia el tiempo, no al reves. Hay mucha gente que piensa que el tiempo es suyo, y con tanta prepotencia que incluso piensan que va hacia ellos. Si, tienes razón, a mucha gente le hace falta coger ese tren, si lo ven... saludo reciproco¡¡¡
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